miércoles, 18 de marzo de 2015

Sí hay quinto malo: "Historia de Sami" de Verónica Murguía* vs. "Un chucho mejicano"-"Perros e hijos de perra" de Arturo Pérez-Reverte

Un quinto caso en que aparece la mano de Sealtiel Alatriste.
Aquí la historia recogida en la edición en línea del diario La Jornada del 17 de marzo de 2015...

La escritora mexicana Verónica Murguía (DF, 1960) atribuye plagio al autor español Arturo Pérez-Reverte (Cartagena, 1951) por el artículo "Un chucho mejicano", que reproduce la historia de Sami, un perro callejero.
Pérez-Reverte lamenta la situación, ofrece disculpas a la escritora y subraya que esa historia la escribió tal y como se la contó el escritor Sealtiel Alatriste.
El artículo original se publicó el 10 de noviembre de 1997 en la revista quincenal El laberinto urbano, con el título: “Historia de Sami”, firmado por Verónica Murguía.
Meses después, el domingo 15 de marzo de 1998, Arturo Pérez-Reverte publicó en El Semanal el artículo "Un chucho mejicano", que tiene la anécdota, narrada en el mismo orden cronológico, y frases completas idénticas a las del texto de Murguía.
“Un chucho mejicano”, fue recogido en Perros e hijos de perra (Alfaguara), la obra más reciente de Pérez-Reverte, y fue hasta ahora, con la publicación del libro, que Murguía se dio cuenta del plagio.

"Hay frases idénticas. La anécdota es idéntica, con la excepción de que yo la protagonicé con el pobre perro, que además dudo que haya visto (como lo menciona en el libro) porque murió poco tiempo después de haber escrito mi artículo", indica Verónica Murguía a La Jornada, y precisa que no entablará acción legal contra el integrante de la Real Academia Española.
“No quiero dinero ni voy a entablar una batalla legal con un hombre que es mucho más poderoso y rico que yo. No soy ni poderosa ni rica, pero por esas razones me parece de lo más horrible que alguien haga pasar un documento como suyo, cuando es una persona que tiene una carrera hecha y derecha y no necesita nada y le publican donde sea. Lo que quiero es una disculpa pública, que retire el texto del libro, y si no lo hace entonces que done una parte de las ganancias a un refugio de perros en México.
“Esa historia que plagió es una historia de amor con mi mascota, la llenó de pintoresquismos que no me gustan: el mariachi, el tequila y que ni siquiera dijo ‘ándale o híjole’ cuando lo llevamos al veterinario, o que parecía que fue con Villa a la toma de Zacatecas. México no es tierra de narcos, tequila y mariachi nada más; también es el México de la clase media que trata de rescatar un animal y que se une a su alrededor por compasión. Quisiera que me ofreciera una disculpa y que no confiara en Sealtiel Alatriste, quien nunca fue mi vecino, y que ya tiene una cola que le pisen larguísima”, en referencia a las acusaciones de plagio que en 2012 llevaron al entonces titular de la Coordinación de Difusión Cultural de la Universidad Nacional Autónoma de México a dejar el cargo y renunciar al premio Xavier Villaurrutia que recién se le había concedido.

Querella en España

El escritor en entrevista telefónica desde Madrid dijo a La Jornada que desconocía la existencia del texto de Verónica Murguía, aunque la escritora sí aparece en "Un chucho mejicano".
El triángulo del mal de derecha a izquierda: Pérez Reverte,
 Saramago y Alatriste. Foto tomada de Internet

“Desde el principio del texto digo que es una historia que me contó Sealtiel (Alatriste). Estuve con él en noviembre en México por lo de la Feria de Guadalajara y anduvimos por la ciudad de México. Ya no recuerdo, pero me llevó por el barrio y me dijo ‘mira en este barrio’, ‘el perro’, y ya no recuerdo si vi al perro o me lo describió tan bien que lo conté como él me lo contó. Si la historia estaba tomada, leída por Sealtiel en un relato, pues evidentemente me disculpo con la señora. Fue sorprendida mi buena fe.”
Subrayó que escribió lo que ocurrió con Sami tal como lo cito. "Si realmente las frases son parecidas o idénticas Sealtiel fue quien me contó la historia, quizá tal como él la habría leído. No estoy acusando a Sealtiel.
‘‘No sé de ese perro más que lo que Sealtiel me contó, lo que él me dijo que había ocurrido en el barrio. Tampoco creo que me lo haya contado de mala fe, y después esa historia la conté yo.
Era una historia bonita que si hubiera sabido que había un artículo sobre eso lo habría citado. Es evidente que la señora tiene mis disculpas, si eso ha sido así, pero que quede claro que yo cité la fuente, lo primero que hago es decir que Sealtiel me contó la historia.
–Hay una parte donde dice que al conocer la historia le interesó ver al perro y lo describe como un esmirriado chucho blanco con manchas negras, a medio camino entre un zorrillo y un pastor alemán. Esas, entre otras, son palabras del texto de Verónica Murguía.

–Yo diría que creo que lo vimos. Mi recuerdo es ese, pero en este momento ya no puedo decirte si el recuerdo es de mi propio artículo, de lo que Sealtiel me describió, o que lo vimos. Recuerdo que había perros, vimos un perro en la calle y dijo: ese es el perro. Pero ahora a tanta distancia no sabría decirte.


Textos originales para comparar:
¡Disculpa de Pérez-Reverte!


Foto propiedad de Verónica Murguía cedida a La Jornada
*Verónica Murguía pertenece al Sistema Nacional de Creadores.



domingo, 19 de febrero de 2012

¿Por qué Alfaguara?

Existen muchas preguntas al respecto.
La respuesta más sencilla sería que la editorial ignoraba todos los trucos que el editor y director de Alfaguara México en los años 90 hacía para beneficiar a escritores afamados a partir de modestos textos adquiridos por las vías del concurso o por la ingenua voluntad de quienes deseaban contar con una evaluación de la editorial para su impresión.
El hecho es que Sealtiel Alatriste también ha dañado el prestigio de Alfaguara. Lamentable sería que la editorial a sabiendas hubiera solapado los hechos.
Aquí se recogen las historias de cuatro personas, incluído el que escribe, cuya producción literaria fue prácticamente robada por Alatriste.
Seguramente habrá más que no intentaron denunciar, que llegaron a algún acuerdo o que ni se enteraron del abuso. Quizá en el próximo futuro se sumen otras historias.
Pero, ¿por qué?, ¿por qué Alfaguara?

lunes, 13 de julio de 2009

"¡Últimas noticias!" de Teófilo Huerta vs. "Las intermitencias de la muerte" de José Saramago


Nombre y fecha de creación obra original: ¡Últimas noticias!, 1983
Editorial y fecha de publicación obra original: Quetzalcóatl, 1987
Entrega de obra engargolada a Alfaguara para dictamen: 1997
Nombre, editorial y fecha de publicación obra plagiaria: Las intermitencias de la muerte, Alfaguara, 2005
Modus operandi: Aprovechamiento de obra recibida para dictamen



El escritor portugués y premio Nobel de Literatura José Saramago ha abusado tras de que la novela Las intermitencias de la muerte es una derivación sin el debido consentimiento de mi cuento ¡Últimas noticias! dentro del compendio La segunda muerte y otros cuentos de fúnebre y amorosa hechura registrado en 1986 ante el hoy Instituto Nacional del Derecho de Autor en México.

¡Últimas noticias! fue escrito en 1983 para el Primer Concurso de Cuento de Ciencia Ficción convocado por la representación del CONACYT Puebla (1984), sin que allí obtuviera premio o mención alguna. Posteriormente, registré mi obra de cuentos, incluido aquél, ante la entonces Dirección General del Derecho de Autor hoy INDAUTOR, bajo el título La segunda muerte y otros cuentos de fúnebre y amorosa hechura. El número de registro otorgado fue el 8369/86.

También publiqué mi obra bajo el mismo nombre en una edición limitada en 1987 por Editorial Quetzalcóatl.

Posteriormente participé en 1997 en el concurso Cuento triste convocado por el diario Reforma y Editorial Alfaguara, con el relato La mujer rojinegra y obtuve por el mismo una mención honorífica. Fue allí que entré en contacto con Grupo Santillana-Alfaguara en México y entregué mi pequeña obra sin ningún acuse de recibido en la puerta de la editorial. El sobre estaba dirigido a Laura Lara cuando en ese entonces Sealtiel Alatriste era el director de la editorial y quien a la postre estuvo físicamente muy cerca del portugués radicado en España cuando fue cónsul de México en Barcelona e íntimamente ligado a él en sucesivas presentaciones literarias. Hoy el sospechoso intermediario (o escritor fantasma del Nobel) se desempeña como Coordinador de Difusión Cultural de la Universidad Nacional Autónoma de México.

El 26 de mayo de 2006 comparecí ante la Dirección Jurídica del Instituto Nacional del Derecho de Autor (INDAUTOR) en relación a la junta de avenencia promovida para dirimir la derivación de la novela. Por la contraparte no asistió persona alguna que representara legalmente al señor José Saramago, toda vez que no ocurrió la notificación porque el domicilio particular de éste no coincide con el de Editorial Santillana al que se dirigió el citatorio. Se levantó un Acta de la comparecencia y se archivó el procedimiento administrativo.

A pesar del escenario en que una lucha legal implicaría más de cinco años para demostrar la verdad de mis dichos y otros cuatro años para resarcir los daños inherentes, y también ante las actuales circunstancias de no poder contar hasta ahora con un peritaje literario serio, además obviamente a las limitaciones presupuestarias para la titánica lucha, no agoto aún los cauces jurídicos y mantengo mi convicción sobre los hechos.

No por sorpresivo el hecho deja de tener veracidad. Mi intención no es el escándalo, el protagonismo, la fama o el dinero. Simplemente elemental justicia.

José Saramago podrá escudarse en argucias como el cliché, la inter e hipertextualidad, aducir mera inspiración, coincidencia o influencia y sostener que las ideas son universales y esas no se protegen, no obstante el hecho es que la creación es un acto único e individual y basarse en la de otro finalmente constituye un hurto. La novela de Saramago es una obra derivada pero que no puede ser explotada sin la autorización del titular del derecho de la obra primigenia, de acuerdo con el Artículo 78 de la Ley Federal del Derecho de Autor.

Hay un evidente parafraseo en situaciones particulares; una coherencia textual (pasajes paralelos); las construcciones sintácticas son similares; el modo de narración es satírico en ambas obras; no hay coincidencias fortuitas ni clichés, sino una clara concordancia de ideas.

Ver comparativo de obras en blog Saramago, plagiario

"Los días contados" de Pedro Ochoa* vs. "La tragedia de Colosio" de Héctor Aguilar Camín

Fecha de creación obra original: 1999
Fecha de publicación fragmentos obra original: Variada previa a 2004 en diarios locales.
Entrega de obra a Alfagura para dictamen: 1999
Editorial y fecha de publicación obra plagiaria: 2004
Modus Operandi: Aprovechamiento de la obra recibida para dictamen.

"Los Días Contados, lo concluí entre 1998 y 1999 -expresa Pedro Ochoa-, lo hice llegar a la editorial Alfaguara, un amigo la entregó directamente a Sealtiel Alatriste, director de la citada editorial. Coincidentemente en 1999 Alatriste visitó Tijuana, para dar una plática en el Centro Cultural Tijuana, tuve una conversación con él, y básicamente me dijo dos cosas: que la estructura del libro hacía difícil su lectura y que en ese momento al lector le interesaba más la elección del 2000, por lo cual la publicación no era posible, según la propia opinión de Alatriste.

Cuál fue mi sorpresa en 2004 coincidiendo con los diez años de la muerte de Colosio, al ver publicado por la propia Alfaguara La Tragedia de Colosio del escritor Héctor Aguilar Camín, libro que coincide con la metodología, hecho a base de citas muchas de ellas similares, el ritmo narrativo, la secuencia de voces y el razonamiento general de la compilación, que no pretende encontrar conclusiones sino relacionar declaraciones de personajes vinculados , para que sea el lector quien arme el rompecabezas y juzgue. Como muchas personas habían conocido mi texto, de hecho se habían publicado avances en algunos medios locales en diferentes años ( Tijuanametro, El Mexicano y Frontera ), las reacciones no se hicieron esperar. Mario Ortiz Villacorta, Cronista de la Ciudad de Tijuana, publicó el artículo ¿Plagiario Aguilar Camín? ( Frontera , 14/06/2004), en el cual realiza un análisis de mi texto y lo confronta con el publicado por Alfaguara. El periodista cultural Jaime Cháydez, citando a Ortiz Villacorta, cuestionó personalmente a Aguilar Camín, sobre el conocimiento de mi libro, a lo cual Aguilar solamente respondió con cierto asomo de cinismo: ¿Cómo se llama el libro de Pedro?...

En mayo de 2005, con estos argumentos y otras semejanzas, dirigí una carta a la actual Directora de Alfaguara, Marisol Schultz, quien jamás me respondió.
Alfaguara y Aguilar Camín, están en calidad de sospechosos de haber violado mi derecho autoral".

Artículo publicado originalmente en el semanario Zeta.

*Pedro Ochoa Palacio fue Agregado Cultural del Consulado de México en San Diego, California. Ocupó dos veces la dirección del Centro Cultural Tijuana. Acualmente es secretario de Cultura de Baja California.

"Un Dios para Cordelia" de Malú Huacuja del Toro* vs. versión preliminar de "Cielos de la tierra" de Carmen Boullosa


Nombre, editorial y fecha de publicación original: Un Dios para Cordelia, Océano,
Nombre, editorial y fecha de publicación obra que en un inicio (a editarse por Océano) era abiertamente plagiaria y ulteriormente transformada: Cielos de la tierra, Alfaguara, 1997
Modus operandi: Aprovechamiento de obra recibida para concurso y dictamen.


"...leyendo en el periódico La Jornada una entrevista con Carmen Boullosa...informaba desde Alemania estar escribiendo —con una beca de las autoridades alemanas— una novela. Lo notorio fue que contó el argumento y que éste era portentosamente parecido al del libro que yo acababa de publicar, Un Dios para Cordelia

"Según Boullosa, su libro ocurría también en un futuro, era protagonizado por una heroína que se llamaba Cordelia y narraba dos historias paralelas, una ubicada en el cielo y otra en la tierra. El tema era la pérdida de la memoria colectiva, como en mi novela.

"Yo había sometido mi manuscrito a consideración de varias editoriales y hasta a un concurso de novela que no gané... ¿Quiénes habían sido los inescrupulosos jurados o dictaminadores en cuyas manos había caído mi trabajo? Lo ignoraba, pero era evidente que nadie le había informado a Carmen Boullosa que esa historia que quién sabe cómo había conseguido leer y con la que se había postulado para una beca para ir a Alemania a inspirarse (¿?) y a escribirla, estaba ya en la imprenta, lista para ser publicada bajo el sello de la editorial Océano.

"..lo que sí hizo Carmen Boullosa en la dicha novela titulada Cielos de la tierra (también! Alfaguara, pero en 1997) fue poner que debido a la tal pérdida de memoria su protagonista se había cambiado el nombre y ahora se llamaba Lear, y no sé si para curarse en salud o qué, pero metió un prólogo que decía que su libro “no es un libro de autor sino de autores” y que "la verdadera autoría" no pertenecía más que "al pulsar de una violencia destructiva" que ella "percibió en el aire". La trama generada por tal “violencia destructiva” siguió desarrollándose, como su nombre lo indica, en dos planos, uno celestial y otro terrestre en un futuro cercano.

Ver más en blog de la autora.

*Malú Huacuja del Toro reside actualmente en Nueva York.

"El unicornio azul" de Víctor Celorio* vs. "Diana o la cazadora solitaria" de Carlos Fuentes


Nombre y fecha de creación obra original: El unicornio azul, 1985
Nombre, editorial y fecha publicación de obra plagiaria: Diana o la cazadora solitaria, Alfaguara, 1994
Modus operandi: Aprovechamiento de obra recibida en concurso.



El escritor mexicano Víctor Celorio ha acusado al famoso autor de Diana o la cazadora solitaria, Carlos Fuentes, de haber plagiado su novela El unicornio azul (De sirenas y unicornios). Según la demanda presentada por este novelista y poeta ante la Sociedad de Derechos de Autor, Fuentes utilizó «110 citas textuales» de El unicornio azul en su popular obra y las coincidencias incluyen «textos, frases y renglones» en algunas de las cuales «sólo fueron cambiados los nombres de los personajes».

El unicornio azul fue escrita en 1985 y quedó finalista en el premio Planeta y Janés de novela política de 1988. Sin embargo, y según Celorio, «dichos premios nunca fueron entregados, por lo cual decidí retirar la novela del concurso y regalarla entre mis amigos». Según este autor, «al leer Diana... cuando se publicó (1994) me apercibí de que existían una serie de similitudes extraordinarias». Celorio es un autor desconocido en los círculos literarios mexicanos y la única mención destacable de su biografía es el premio internacional «Golden Poet Award» 1989 otorgado por la Sociedad de Poesía Mundial de Sacramento, California.

La denuncia de Celorio fue refrendada ante un juzgado federal y no sólo se dirige contra el autor, sino también contra la editorial Alfaguara. Celorio solicita que Diana o la cazadora solitaria sea retirada no sólo del mercado mexicano sino del resto de los países donde se distribuye. Asimismo, el escritor exige el «embargo económico» de los beneficios conseguidos por la venta de esta obra.


Ha declarado Víctor Celorio:

"El plagio literario ha sido históricamente raro en todo el mundo. Por eso cuando ocurre es tan llamativo. A pesar de esta constancia histórica, es de destacar que en México han ocurrido dos casos muy sonados en los últimos años. El de Víctor Celorio contra Carlos Fuentes en los noventas, y recientemente el de Teófilo Huerta Moreno contra José Saramago. Pero lo más curioso de esto es que en ambos casos ha estado involucrado directamente un hombre de mala fama que por donde pasa deja huella negra: me refiero a Sealtiel Alatriste.

Veamos: dos escritores mexicanos envían su obra a un concurso, sus obras son después "fusiladas", y en ambos casos Sealtiel Alatriste termina involucrado. ¿Cuáles son las posibilidades estadísticas de que algo así ocurra por casualidad? Y ahora ese mismo oportunista político y vividor del erario es nombrado Coordinador de Difusión Cultural de la UNAM.¡Válgame! ¡El lobo a cuidar de las ovejas!"

Ver Comparativo de las Novelas.

Descarga de novela El unicornio azul (De sirenas y unicornios)


*Víctor Celorio es presidente de InstaBook y reside actualmente en Gainesville, Florida.